Compatibilidad astrológica entre Cáncer y Géminis

Cuando dos signos, uno de aire y el otro de agua, se combinan, pueden fácilmente generar una oleada de desastres. De modo que han de cooperar mucho si quieren mantener las cosas bajo control. Veamos algunas pautas para lograr este objetivo.

OPUESTOS DESDE EL PRINCIPIO

Lo primero que hay que mencionar de estos dos signos es que si uno va a la derecha, el otro ya se habrá encaminado hacia la izquierda; si uno ama la claridad del día y los brillantes rayos del sol, el otro prefiere el cobijo de la tranquila noche. Cáncer y Géminis son signos opuestos, sus esperanzas y sueños navegan en sentidos contrarios de la corriente. Pero, ¿qué ocurre cuando se juntan?, ¿hacia dónde fluirá el río de sus intenciones?

La sabiduría popular es muy versada en historias que hacen alusión a la buena estrella que alumbra una relación entre dos personas, una extrovertida y sociable y la otra tímida e introvertida. Es una tendencia inevitable, en el reino de la astrología el tímido Cáncer busca expresarse a través del extrovertido Géminis; cuando están en estrecha relación, tratará de que sean sus palabras las que salgan a través de la boca de los gemelos. Géminis, por su lado, degustará el dulce sabor de hacer suya una timidez que no le pertenece y vivirla desde una perspectiva más profunda. Para ambos, el acercamiento significará ampliar sus ámbitos de maniobra.

Cáncer, recubierto por una coraza que puede utilizar cada vez que sienta un inminente riesgo en el ambiente, explora los recovecos de la vida desde el plano de las emociones. Basado en las propiedades que la luna le otorga, se enraíza en las vivencias infantiles que dejaron trazas emocionales muy marcadas en su pasado. Los recuerdos se alimentan de las emociones, por ello, cuando Cáncer confronte las vicisitudes del día a día, siempre reaccionará intuitivamente, gatillado por una asociación de recuerdos que se convierte momentáneamente en el amo de su comportamiento. Su tendencia habitual será la de resguardarse en la frágil carcasa de calcio que tiene por cubil.

Géminis, dotado de una locuacidad envidiable, ancla sus movimientos en torno a la razón, en constante debate consigo mismo, generará constantemente argumentos convincentes que podrían convencer al más escéptico. Por supuesto, sus palabras serán tan apropiadas, tan bien preparadas y adaptadas al contexto en el que cobran vida, que se convencerá él mismo de que aquello que dice es cierto. Lo curioso es que, puesto que sus pensamientos no cesan su confrontación, cambiará de parecer con tanta recurrencia que terminará uniéndose al bando contra el que inicialmente contendía.

CRUCE DE CAMINOS: NUEVOS HORIZONTES

Cuando sus caminos se cruzan, entre ellos se desarrolla una dinámica que los lleva a explorar nuevos horizontes. Géminis escalará a una cúspide desde la que podrá inmiscuirse más en lo emocional, con una exquisitez muy propia. Cáncer se descubrirá caminando por terrenos que habitualmente solía rehuir, sentirá bajo sus pies el agradable cosquilleo de sentirse seguro en un lugar en el que siempre había querido estar pero que hasta ahora le había sido inalcanzable.

En pareja, Cáncer buscará resguardarse en el tierno abrazo de Géminis; disfrutará por adelantado de la ilusión de una vida hogareña; requerirá de atenciones especiales, que extiendan ante sus ojos una alfombra romántica. Géminis, acostumbrado a una rutina más activa, más pública, sentirá cómo el aire se le va agotando en las cercanías de Cáncer. Sin embargo, si logra comprender, en esas horas de razonamiento, que puede desplegar muy bien todo lo que tiene por dar en un ambiente más familiar, sin necesidad de coartarse, podrá disfrutar la alegría de formar una vida junto a Cáncer.