Claves para una convivencia exitosa con Tauro

Los Taurinos son personas muy racionales y con los pies bien puestos sobre la tierra. Son esencialmente prácticos, y cada detalle cotidiano buscan resolverlo de la manera más sencilla. No les gusta para nada complicar lo que es sencillo, ni estar escuchando permanentemente reclamos. En este sentido tienen muy poca paciencia, y no son tolerantes. Este es uno de sus puntos más débiles, pues les cuesta mucho ponerse en el lugar del otro. Como consecuencia, quienes viven con un taurino, pueden ser reticentes también a tener empatía con Tauro. De esta manera se establece una especie de “competencia” en la que ninguna de las dos partes está dispuesto a ceder. La actitud de Tauro, es la que genera este comportamiento tan negativo.

Lo mejor de convivir con Tauro

El sentido de practicidad y sencillez de Tauro, hacen de este signo un buen compañero para convivir. Tanto los hombres como las mujeres de Tauro, son personas que buscan solucionar los problemas de una directa. No son personas ambiciosas, por lo cual no caen en conductas extremas. Cuando otros signos por ejemplo, desean comprar todos los muebles para su hogar, y que sean de alta calidad, Tauro se adapta a lo que realmente puede.

Los taurinos son personas que si bien pueden tener un carácter explosivo, tratan de evitar las discusiones y las situaciones tensas. En la casa de un taurino no se escucharán gritos ni habrá peleas fuertes. Sin embargo cuando Tauro se enoja, y lo más conveniente para su pareja, es que lo dejen tranquilo. No hablarse y esperar a que su enojo pase, es la mejor idea. A pesar de que no son muy ordenados, los taurinos tampoco son muy exigentes. Por ello que es muy difícil tener discusiones por razones domésticas. Tanto que una cosa quede en un lugar o en otro, para Tauro será exactamente lo mismo.

Lo más difícil de convivir con Tauro

En el plano sentimental, Tauro es un signo complejo. Desde muy joven, muestra muchas dificultades para expresar sus sentimientos. Generalmente les toca una infancia difícil, y no saben pedir ayuda. Tampoco se abren, ni siquiera con sus amigos más íntimos. Los taurinos suelen guardarse los problemas y todo cuanto les preocupa, y cuando se exoresan ya es un poco tarde. Suelen estallar y ahí el diálogo se torna casi imposible. Los taurinos pueden llegar a perder su gran racionalidad, cuando se trata de asuntos económicos. Si bien no son ambiciosos, son un poco materialistas y muy austeros.

Convivir con Tauro, requiere estar dispuesto a sobrellevar períodos en los que la relación se torna muy fría. Y no necesariamente porque estén atravesando una crisis. Los taurinos no son personas enamoradizas, y ellos mismos reconocen que les cuesta encontrar al gran amor de su vida. Aún cuando eso sucede, les cuesta encontrar la forma de comunicarse íntimamente con su pareja. Especialmente los hombres de Tauro, pueden parecer hombres “mujeriegos” en la medida que establecen muchos vínculos con distintas mujeres. Pero solo uno será el realmente importante en su vida.